726- podcast diario

mancha – safar – chucha – bajada

1. Yo ya , muchachos, es tarde. Mañana en la mañana me comprometí en acompañar a mi hermano a su partido de fútbol. 
2. ¿Quién se va a hacer la ? Ayer la invitamos Carlos y yo. 
3. Tengo mucha hambre, en casa me está esperando la .
4. -Y luego de eso le dio una bofetada, así como en la telenovelas.
   -¡ ! ¿En serio? No creo que le haya abofeteado…
5. Todos los fines de semana llegaba una de gente a casa de Marcos y se montaban unas buenas fiestas. 
6. Me lo más rápido que pude de ese teléfono, me tenía harto. Con un dinero que tenía ahorrado y lo que me dieron por vender el viejo, me compré uno nuevo. 
7. Qué eres para el baloncesto. Eres demasiado bueno. 
8. ¿Pero en qué te gastaste el dinero? Sabes que teníamos gastos más importantes.
9. En casa de la abuela se preparan unas de otro mundo. 
10. Nunca se me hizo difícil socializar, cuando menos me daba cuenta, estaba con una haciendo cualquier cosa. 
11. -¿Dónde está Franco?
    -Franco ya . Su mamá lo llamó, le dio tremendo regaño.
12. Llegamos en a la cancha y todo el mundo quedó un poco impactado, pensaban que todos éramos conocidos o algo así.

mancha – safar – chucha – bajada

Después de salir del trabajo fuimos a por la , ninguno había cenado. Unos pocos compañeros y yo éramos los que habíamos ido a comer, no muchos. Una situación llevó a la otra y al caer más tarde la noche estábamos con una camino a una fiesta en una granja a las afueras de la ciudad. 

Duramos como 30 minutos yendo a la granja pero, ¡ , qué incómodo estaba en esa camioneta! Éramos muchas personas para una sola camioneta. Cuando llegamos, también había una en esa granja, ya tenían un buen rato con la fiesta. 

Rápidamente me reuní junto a mis compañeros. Éramos jóvenes y no pensábamos muy bien lo que hacíamos, todos éramos recién graduados. Luego de algunas horas ya quería de allí, irme a mi casa a descansar porque al día siguiente había que ir a trabajar.

Me costó convencer a mi compañero que tenía la camioneta, pero finalmente nos los dos de allí. Llegamos a casa por la madrugada. Cuando llegué, mi mamá me había hecho la esperando que llegara, aproveché y me la comí porque había llegado con hambre, a pesar de haber comido horas antes.